En el mundo de las ficciones hay villanas y villanos inolvidables, y la malvada que compuso la actriz brasileña Adriana Esteves de 49años, para la exitosísima tira Avenida Brasil es una mala de novela con todas las letras.
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¡La peor! Y uno de los motivos clave, más allá del gran libro y las actuaciones, del éxito internacional de este culebrón que, estrenado en su país en 2012 (en Argentina en 2014), se sigue repitiendo una y otra vez en todos los países por los que alguna vez pasó.
Y, cuando uno podría pensar que el gran elenco que la realizó ni siquiera consideraría una segunda parte, por aquello de que las segundas nunca son buenas, Adriana sorprende y dice que “me encantaría”.
Es que durante la pandemia, en Brasil también se repitió la tira (como en Argentina, en Telefe) con rotundo éxito, y la pregunta surgió... “Sería hermoso ver qué pasaría con todos estos personajes, por ejemplo, diez años después.
Creo que sería increíble tener una segunda temporada, una Avenida Brasil 2, o un especial. Si yo fuera público, me encantaría verlo”, dice Adriana, coincidiendo con Débora Falabella (Nina/ Rita), Caua Reymond (Jorgito), y la directora, Amora Mautner, quien dijo: “La zorra interpretada por Adriana sería un gran spin off”.
Hoy Adriana está haciendo otro gran éxito en el prime time de la tevé brasileña. Se trata de la tira Amor de Madre, con tres protagonistas femeninas (Esteves, Thais Araujo y Regina Casé), y un elenco de estrellas, por ejemplo, Murilo Bencio (Tifón en Avenida Brasil). Y donde Esteves vuelve a trabajar con su marido, Vladimir Brichta de 44 años, aunque no comparten escenas.
Amor y armonía
“Hace 15 años que estamos juntos. Nos casamos en 2006 y él es mi enamorado eterno, y yo su enamorada”, asegura la actriz, quien en la historia es Thelma, una viuda que vive para su único hijo, sobreprotectora y que cambia cuando descubre un aneurisma inoperable.
En la vida real, Adriana es madre de Felipe Ricca (20), de la relación con Marco Ricca, su anterior marido, y Vicente (14), su hijo con Vladimir. Y él, por su parte, tiene a Agnes (23) hija de su anterior pareja. “El amor de madre es el mismo para todos mis hijos, Con Vlad (así lo llama a Vladimir) estamos juntos hace muchos años y hemos formado una linda familia”, dice Adriana.
“¿Qué clase de madre soy? Mezclen un poco de Carminha y otro de Thelma”, bromea. “Soy una madre corriente, como todas. Apasionada, que protege, que quiere lo mejor para sus hijos, que lucho por la educación. Pero trato de no invadir su libertad de crecimiento”.
A punto de cumplir 50 años en diciembre, la actriz atribuye la belleza y el estado físico a la atención médica frecuente. Y cuando se le pregunta sobre su reacción si estuviera en el lugar de Thelma, asegura: “Nunca pienso en esas cosas, solo trabajo con lo positivo”.
Por último, Adriana nos revela un pequeño secreto de la pareja para mantener citas y Vlad rápidamente entendió que querría esto por el resto de mi vida. ¡Vístete, sal, da un paseo! Incluso cansados, decimos ‘hoy es el día’. Los dos tenemos personalidades muy diferentes: A veces salimos con amigos, pero no vamos a lugares con mucha gente. Soy un poco salvaje y Vlad es megasociable, ¡es de Bahía! No me siento segura en lugares muy concurridos. Y, como puedo elegir, elijo donde estoy más segura”.
Tal como dice Adriana y asiente Vladimir, su relación es pura “armonía”. “Somos amantes, compañeros, la camaradería es importante en la pareja y no la hemos perdido”, dice Vlad, enamorado de “Dri” (así la llama) como hace 15 años. Y viceversa. “Absolutamente enamorados”, cierra Adriana, la malvada más buena de la tevé.
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