La siempre espléndida Natalia Lobo (55), retirada de la actuación, estuvo en el gran evento que realizó la marca de relojes Omega en Punta del Este, donde quedó claro que los años no pasan para ella. Está divina. La actriz, quien alcanzó la popularidad a través de innumerables ficciones televisivas, le dijo adiós a la actuación hace seis años.
“Un día sentí que había cambiado todo y que no quería estar más ahí, entonces cambié yo. Lo sentí en el alma. Me sorprendí a mí misma con esta decisión”, le dijo a diario El País de Uruguay. Lejos de la pantalla, cuenta que hoy está dedicada a “estudiar coaching y trabajar con la familia”. Y jura que “no extraño nada” de la televisión: ni el trabajo ni la popularidad. Incluso asegura que también se alejó de la industria como espectadora. “Voy poco al teatro y no consumo nada de televisión. Miro algo de Netflix, como Envidiosa que me encantó. Pero de televisión abierta, nada, en casa ni siquiera tengo”, dijo la actriz argentina.
Instalada en Punta del Este por sus vacaciones, Natalia dice que disfruta de “caminar temprano en la playa, meterme al agua, andar en bicicleta, leer y ver amigos”. Y agrega: “Soy muy introspectiva, pero también me gusta ir a eventos y encontrarme con amigos”.

La Hora de los Seniors
Lobo insiste en que le gusta “todo de Punta del Este” al punto que había comenzado a organizar su casamiento en un bosque de Maldonado para 2020. Aquel plan finalmente se frustró por la pandemia y terminó contrayendo matrimonio dos años después en el Boating Club de San Isidro. La boda fue con el empresario Ariel Polaco, de quien se separó al año siguiente.

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Natalia Lobo es mamá de Inti (23), a quien tuvo con su ex Pablo Pirillo.
at Redacción Semanario
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