Saturday 8 de February de 2025
SALUD | 31-01-2025 16:38

Tamarindo: La fruta que controla el colesterol

Aunque en Argentina solo se consigue en tiendas especializadas, el tamarindo es común en México, Perú y el Caribe. Este fruto, conocido por su uso en la famosa "agua" de tamarindo mencionada por El Chavo del 8, tiene múltiples beneficios, incluyendo ocho veces más potasio que la banana, alivio del dolor muscular y regulación de la presión arterial.

Seguramente lo conoces por esos episodios de El Chavo que hablan del agua de tamarindo. Pero consumir este fruto puede cambiarte la vida. Identificado por su nombre científico Tamarindus indica, proviene de la familia papilionáceas o leguminosas. Se conoce como tamarindo, tanto al árbol como a su fruto. En la India, el tamarindo es conocido como “dátil de la India”.

Este fruto tropical es de origen africano, aunque en la actualidad, India es su principal productor y consumidor. El cultivo de tamarindo se ha extendido en zonas tropicales de todo el mundo, así como en América Central y Sudamérica. En Argentina, se consigue en tiendas especializadas.

Tamarindo

El fruto del tamarindo se encuentra en el interior de unas vainas largas y curvas. Al abrir dichas vainas, encontramos el fruto comestible, de aspecto denso y pegajoso, de color marrón oscuro, muy adherido al hueso o semilla redonda, envuelto en unos hilos vegetales que deben ser eliminados. El sabor de la pulpa es agridulce e intenso, resultando mucho más ácida, o incluso picante, cuando está verde. Esta contraposición de sabores la hace idónea para aplicarla en las artes culinarias, tanto en platos dulces como en salados.

Mil y Una Propiedades

El tamarindo no solo se destaca por su contenido en potasio, sino también por ser una fuente rica en magnesio, otro mineral clave para el sistema nervioso y cardiovascular. Juntos, estos nutrientes ayudan a aliviar dolores musculares, prevenir calambres y mantener la presión arterial dentro de niveles saludables.

Además de sus beneficios musculares, es conocido por sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. Contiene polifenoles y flavonoides que combaten el estrés oxidativo, un factor relacionado con el envejecimiento y el desarrollo de enfermedades crónicas. El consumo regular de esta fruta puede contribuir a prevenir afecciones como la hipertensión, problemas cardiovasculares y alteraciones del sistema inmunológico.

Otro aspecto destacado es su capacidad para facilitar el tránsito intestinal. Por su contenido en fibra, el tamarindo actúa como un laxante natural, promoviendo una buena digestión y previniendo el estreñimiento.

Tamarindo

Algunos de sus Beneficios Más Destacados

  • Alivio de calambres y dolores musculares: Su alto contenido de potasio y magnesio lo hace perfecto para deportistas o personas activas.

  • Regulación de la presión arterial: Estos minerales contribuyen a mantener el sistema cardiovascular en óptimas condiciones.

  • Mejora del sistema inmunológico: Sus antioxidantes fortalecen las defensas del cuerpo.

  • Control del colesterol: Ayuda a reducir los niveles de colesterol malo (LDL), protegiendo al corazón.

  • Embellecimiento de la piel: Los nutrientes del tamarindo favorecen la regeneración celular y combaten la sequedad cutánea.

  • Efecto antiinflamatorio: Reduce hinchazones y molestias asociadas a inflamaciones crónicas.

  • Promoción de una buena digestión: Su fibra natural regula el tránsito intestinal.

  • Antidiabético: Su riqueza en fibra absorbe los azúcares alojados en el intestino.

  • Regenerador macular: Su vitamina A favorece la vista.

  • Cicatrizante: Sus vitaminas A y C aumentan la regeneración de la piel.

  • Inmunoprotector: Refuerza las defensas naturales del organismo y previene infecciones y bacterias.

Cómo Preparar su “Agua”

El tamarindo se puede comer solo o en preparaciones culinarias y jugos. Un clásico es el agua de tamarindo (consumir con moderación si se tiene alguna enfermedad renal o se necesita controlar la ingesta de potasio: consultar con un médico):

  • Colocá cinco frutos de tamarindo pelados en una olla con un litro de agua y ponela a hervir.

  • Al llegar al punto de ebullición dejá por diez minutos más.

  • Luego pasá por un colador y dejá enfriar para guardar en la heladera.

  • Al momento de tomarla, podés agregar otros ingredientes como limón y miel o semillas de chía.

at Redacción Semanario

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